Descripción: El sensado sin contacto se refiere a técnicas que permiten a los robots recopilar información sobre su entorno sin necesidad de establecer contacto físico con los objetos o superficies. Este enfoque es fundamental en la robótica moderna, ya que facilita la interacción con el entorno de manera segura y eficiente. Utilizando tecnologías como la visión por computadora, ultrasonido, láser y sensores infrarrojos, los robots pueden detectar y medir distancias, identificar objetos y mapear su entorno. Esta capacidad es crucial para aplicaciones en las que el contacto físico podría ser peligroso o poco práctico, como en entornos industriales, médicos o de exploración. Además, el sensado sin contacto permite a los robots operar en condiciones donde la visibilidad es limitada o donde los objetos son frágiles. La precisión y la rapidez de estos sistemas de sensado son esenciales para la toma de decisiones en tiempo real, lo que mejora la autonomía y la eficacia de los robots en diversas tareas.
Historia: El sensado sin contacto ha evolucionado desde los primeros sistemas de detección en la década de 1960, cuando se comenzaron a utilizar sensores ultrasónicos en robótica. A lo largo de los años, la tecnología ha avanzado significativamente, incorporando métodos como la visión por computadora en los años 80 y el uso de láseres en los 90. Estos desarrollos han permitido una mayor precisión y versatilidad en la detección de objetos y la navegación autónoma.
Usos: El sensado sin contacto se utiliza en diversas aplicaciones, incluyendo la robótica industrial para la automatización de procesos, en vehículos autónomos para la navegación y detección de obstáculos, y en la medicina para la monitorización de pacientes sin contacto físico. También se aplica en la exploración espacial y en la robótica de servicio.
Ejemplos: Un ejemplo de sensado sin contacto es el uso de sensores LIDAR en vehículos autónomos, que permiten mapear el entorno y detectar obstáculos. Otro ejemplo es el uso de cámaras de visión por computadora en robots de inspección industrial, que pueden identificar fallos en productos sin tocarlos.