Descripción: Un sensor de seguimiento es un dispositivo diseñado para rastrear el movimiento o cambios en la posición de un objeto o persona. Estos sensores son fundamentales en el ámbito del Internet de las Cosas (IoT), donde permiten la recopilación de datos en tiempo real y la interacción con otros dispositivos conectados. Los sensores de seguimiento pueden utilizar diversas tecnologías, como GPS, acelerómetros, giroscopios y sensores de proximidad, para determinar la ubicación y el movimiento. Su capacidad para proporcionar información precisa y en tiempo real los convierte en herramientas valiosas en múltiples aplicaciones, desde la logística y el transporte hasta la salud y el bienestar. Además, su integración con plataformas de análisis de datos permite a las empresas optimizar procesos, mejorar la eficiencia y ofrecer servicios personalizados. En un mundo cada vez más conectado, los sensores de seguimiento juegan un papel crucial en la creación de entornos inteligentes y en la mejora de la experiencia del usuario.