Descripción: Un sensor submarino es un dispositivo diseñado específicamente para operar bajo el agua, permitiendo realizar diversas mediciones y recopilaciones de datos en entornos acuáticos. Estos sensores son fundamentales en la era del Internet de las Cosas (IoT), ya que permiten la monitorización en tiempo real de parámetros como la temperatura, la salinidad, la presión, la calidad del agua y la presencia de organismos marinos. Los sensores submarinos están diseñados para ser resistentes a la corrosión y a las altas presiones del agua, lo que les permite funcionar eficazmente en profundidades significativas. Además, suelen estar equipados con tecnologías de comunicación que les permiten transmitir datos a la superficie o a dispositivos conectados, facilitando así la integración en redes IoT. Su relevancia radica en su capacidad para proporcionar información crítica para la investigación científica, la gestión de recursos hídricos y la protección del medio ambiente marino. En resumen, los sensores submarinos son herramientas esenciales que combinan tecnología avanzada con la necesidad de entender y preservar nuestros ecosistemas acuáticos.