Descripción: El sesgo financiero se refiere a la discriminación en los servicios financieros impulsada por algoritmos de inteligencia artificial (IA), que afecta el acceso a préstamos y créditos. Este fenómeno ocurre cuando los modelos de IA, diseñados para evaluar la solvencia de los solicitantes, incorporan datos históricos que reflejan desigualdades sociales y económicas. Como resultado, ciertos grupos, especialmente aquellos de comunidades minoritarias o de bajos ingresos, pueden ser injustamente penalizados, limitando su acceso a recursos financieros. El sesgo financiero no solo plantea preocupaciones éticas, sino que también puede perpetuar ciclos de pobreza y exclusión social. La falta de transparencia en los algoritmos y la dificultad para auditar sus decisiones agravan el problema, ya que los usuarios afectados a menudo no tienen forma de entender por qué se les niega un préstamo. Este tipo de sesgo es un reflejo de cómo la tecnología, en lugar de ser una herramienta neutral, puede replicar y amplificar las desigualdades existentes en la sociedad. Por lo tanto, es crucial que las instituciones financieras y los desarrolladores de IA trabajen en la creación de modelos más justos y equitativos, que consideren la diversidad de los solicitantes y promuevan la inclusión financiera.