Descripción: El Sistema de Recuperación de Energía Cinética (KERS, por sus siglas en inglés) es una tecnología diseñada para capturar y almacenar la energía cinética que se genera durante el frenado de un vehículo, energía que de otro modo se perdería en forma de calor. Este sistema permite mejorar la eficiencia energética de los vehículos, ya que recupera parte de la energía que se utiliza para acelerar y la reutiliza en momentos posteriores, como durante la aceleración. KERS se basa en principios de física que permiten transformar la energía cinética en energía eléctrica o mecánica, que luego puede ser almacenada en baterías o volantes de inercia. La implementación de KERS no solo contribuye a la sostenibilidad al reducir el consumo de combustible y las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también mejora el rendimiento del vehículo al proporcionar un impulso adicional cuando es necesario. Esta tecnología se ha vuelto cada vez más relevante en el contexto actual de búsqueda de soluciones sostenibles en el transporte, donde la eficiencia energética es clave para reducir el impacto ambiental. En resumen, el Sistema de Recuperación de Energía Cinética representa un avance significativo en la optimización del uso de la energía en vehículos, alineándose con los objetivos de sostenibilidad y eficiencia energética.
Historia: El concepto de recuperación de energía cinética se remonta a la década de 1960, pero fue en la Fórmula 1 donde se popularizó en la década de 2000. En 2009, la FIA introdujo el KERS como una opción para los equipos, permitiendo que los vehículos recuperaran energía durante las frenadas. Desde entonces, la tecnología ha evolucionado y se ha adaptado a otros sectores, incluyendo automóviles de producción y transporte público.
Usos: Los sistemas KERS se utilizan principalmente en vehículos de carreras, como los de Fórmula 1, donde la eficiencia energética y el rendimiento son cruciales. También se están implementando en vehículos híbridos y eléctricos de producción, así como en sistemas de transporte público, como tranvías y autobuses, para mejorar la eficiencia energética.
Ejemplos: Un ejemplo notable de KERS en acción es el equipo de Fórmula 1 de Ferrari, que utilizó esta tecnología en sus vehículos para mejorar el rendimiento en pista. Además, algunos modelos de coches híbridos, como el Toyota Prius, incorporan sistemas de recuperación de energía que funcionan de manera similar al KERS.