Descripción: Las stablecoins algorítmicas son un tipo de criptomoneda diseñada para mantener un valor estable mediante el uso de algoritmos que regulan su suministro. A diferencia de las stablecoins respaldadas por activos, como el dólar estadounidense o el oro, que están garantizadas por reservas físicas, las stablecoins algorítmicas utilizan mecanismos automáticos para expandir o contraer su oferta en función de la demanda del mercado. Esto se logra a través de contratos inteligentes que ajustan la cantidad de tokens en circulación, buscando siempre mantener un precio objetivo. Este enfoque permite que las stablecoins algorítmicas sean más flexibles y menos dependientes de activos subyacentes, aunque también las hace más susceptibles a la volatilidad del mercado. Su relevancia en el ecosistema DeFi (finanzas descentralizadas) radica en su capacidad para proporcionar estabilidad en un entorno donde las criptomonedas pueden experimentar fluctuaciones drásticas. Al ofrecer una alternativa a las monedas fiduciarias y a otras criptomonedas volátiles, las stablecoins algorítmicas se han convertido en una herramienta valiosa para los usuarios que buscan realizar transacciones, ahorrar o invertir sin el riesgo asociado a la volatilidad típica de las criptomonedas.
Historia: Las stablecoins algorítmicas comenzaron a ganar popularidad a partir de 2018, con el lanzamiento de proyectos como Ampleforth y Terra. Estos proyectos buscaban ofrecer una solución a la volatilidad de las criptomonedas tradicionales, utilizando algoritmos para ajustar la oferta de tokens en función de la demanda del mercado. A lo largo de los años, varios proyectos han intentado implementar este modelo, con diferentes grados de éxito y aceptación en la comunidad cripto.
Usos: Las stablecoins algorítmicas se utilizan principalmente en el ámbito de las finanzas descentralizadas (DeFi) para facilitar transacciones, proporcionar liquidez y servir como medio de intercambio. También son empleadas en plataformas de préstamos y ahorros, donde los usuarios pueden obtener rendimientos sobre sus activos sin la preocupación de la volatilidad del mercado. Además, pueden ser utilizadas como colateral en diversas aplicaciones DeFi.
Ejemplos: Ejemplos de stablecoins algorítmicas incluyen Ampleforth, que ajusta su suministro en función de la demanda, y Terra, que utiliza un sistema de incentivos para mantener su paridad con el dólar. Otro ejemplo es Frax, que combina un modelo algorítmico con un respaldo parcial en activos para mantener su estabilidad.