Descripción: Las técnicas de optimización del rendimiento web son métodos utilizados para mejorar la velocidad y eficiencia de las aplicaciones web. Estas técnicas abarcan una variedad de estrategias que buscan reducir el tiempo de carga de las páginas, mejorar la experiencia del usuario y aumentar la satisfacción general. La optimización del rendimiento web implica la minimización de los recursos necesarios para cargar una página, como imágenes, scripts y hojas de estilo, así como la mejora de la eficiencia en la entrega de contenido. Entre las características principales se encuentran la compresión de archivos, la reducción de solicitudes HTTP, el uso de cachés y la optimización de bases de datos. La relevancia de estas técnicas radica en que un rendimiento web óptimo no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también influye en el posicionamiento en motores de búsqueda, ya que Google y otros buscadores consideran la velocidad de carga como un factor importante en sus algoritmos de clasificación. En un entorno digital en constante evolución, la optimización del rendimiento web se convierte en un aspecto crucial para cualquier desarrollador o propietario de un sitio web que busque atraer y retener visitantes.
