Descripción: El ‘Tiempo fijo’ en el contexto de Kanban se refiere a un período específico durante el cual se espera que una actividad o tarea sea completada. Este concepto es fundamental para la gestión de proyectos y la mejora continua, ya que permite establecer expectativas claras y medibles sobre el rendimiento del equipo. Al definir un tiempo fijo, se facilita la planificación y la priorización de tareas, lo que contribuye a una mayor eficiencia en el flujo de trabajo. Además, el uso de tiempos fijos ayuda a identificar cuellos de botella y áreas de mejora, ya que se pueden analizar los resultados en función de los plazos establecidos. En esencia, el tiempo fijo actúa como un marco que guía el progreso de las actividades, asegurando que se mantenga el enfoque en los objetivos y se optimicen los recursos disponibles. Este enfoque es especialmente útil en entornos ágiles y en metodologías de gestión de proyectos, donde la adaptabilidad y la rapidez son esenciales para el éxito del proyecto.