Descripción: La tolerancia a latencia se refiere a la capacidad de un sistema para manejar retrasos en el procesamiento de datos sin que esto afecte significativamente su rendimiento o funcionalidad. En el contexto de sistemas distribuidos, esta característica es crucial, ya que permite que el sistema continúe operando de manera eficiente incluso cuando hay variaciones en la velocidad de respuesta de los nodos. La tolerancia a latencia implica que el sistema puede gestionar y compensar los tiempos de espera, asegurando que las operaciones de lectura y escritura se realicen de manera fluida. Esto es especialmente importante en entornos donde la disponibilidad y la rapidez son esenciales, como en aplicaciones en línea o redes sociales. La capacidad de un sistema para tolerar latencias también se relaciona con su arquitectura, donde se implementan estrategias como la replicación de datos y el uso de algoritmos de consenso para minimizar el impacto de los retrasos. En resumen, la tolerancia a latencia es un aspecto fundamental que permite a los sistemas modernos mantener un alto nivel de rendimiento y disponibilidad, incluso en condiciones de red adversas o en situaciones de alta carga de trabajo.
