Descripción: La utilización de red se refiere a la medición de cuánto de la capacidad de la red está siendo utilizada en un momento dado. Este concepto es fundamental para la gestión y el monitoreo de redes, ya que permite a los administradores entender el rendimiento de la infraestructura de red y detectar posibles cuellos de botella o problemas de conectividad. La utilización de red se expresa generalmente como un porcentaje de la capacidad total disponible, lo que facilita la comparación entre diferentes momentos y condiciones de operación. Un alto nivel de utilización puede indicar que la red está cerca de su capacidad máxima, lo que podría resultar en una degradación del rendimiento, mientras que niveles bajos pueden sugerir que hay recursos infrautilizados. La observabilidad en este contexto implica no solo la recolección de datos sobre la utilización de red, sino también la capacidad de analizarlos y actuar en consecuencia para optimizar el rendimiento y la eficiencia de la red. Las herramientas de monitoreo y análisis permiten a los equipos de TI obtener información detallada sobre el tráfico de red, identificar patrones de uso y responder rápidamente a incidentes, asegurando así un funcionamiento fluido de los servicios y aplicaciones que dependen de la conectividad de red.