Descripción: Un vector de expresión es una herramienta fundamental en bioinformática y biotecnología, diseñada para introducir un gen específico en una célula huésped con el objetivo de que este gen sea expresado y, por ende, produzca la proteína correspondiente. Estos vectores son generalmente construidos a partir de plásmidos, que son pequeñas moléculas de ADN que pueden replicarse independientemente del ADN cromosómico. Los vectores de expresión contienen elementos esenciales como un promotor, que inicia la transcripción del gen, y secuencias de terminación, que finalizan este proceso. Además, suelen incluir marcadores de selección que permiten identificar las células que han incorporado el vector. La capacidad de manipular estos vectores ha permitido a los científicos estudiar la función de genes específicos, producir proteínas recombinantes para terapias y vacunas, y desarrollar organismos genéticamente modificados. La versatilidad de los vectores de expresión los convierte en herramientas clave en la investigación genética, la producción de fármacos y la ingeniería de proteínas, facilitando avances significativos en la medicina y la biotecnología.
Historia: Los vectores de expresión comenzaron a desarrollarse en la década de 1970, cuando los científicos comenzaron a comprender la estructura y función del ADN. Uno de los hitos importantes fue la creación de plásmidos recombinantes, que permitieron la inserción de genes específicos en células huésped. En 1982, se logró la producción de insulina humana utilizando un vector de expresión, marcando un avance significativo en la biotecnología. Desde entonces, la tecnología de vectores ha evolucionado, incorporando nuevas técnicas como la edición genética y la clonación de genes, lo que ha ampliado su aplicación en la investigación y la medicina.
Usos: Los vectores de expresión se utilizan principalmente en la producción de proteínas recombinantes, que son esenciales para el desarrollo de terapias biológicas y vacunas. También son utilizados en la investigación genética para estudiar la función de genes específicos y en la creación de organismos genéticamente modificados para mejorar características agrícolas. Además, se emplean en la producción de enzimas industriales y en la terapia génica, donde se busca corregir defectos genéticos mediante la introducción de genes funcionales.
Ejemplos: Un ejemplo notable de un vector de expresión es el plásmido pET, que se utiliza ampliamente en la producción de proteínas en bacterias como Escherichia coli. Otro ejemplo es el vector de expresión pGEX, que permite la fusión de proteínas con glutatión S-transferasa para facilitar su purificación. En el ámbito de la terapia génica, se han utilizado vectores virales como el adenovirus para introducir genes terapéuticos en células humanas.