Descripción: Un vínculo duro es una entrada de directorio que asocia un nombre con un archivo en un sistema de archivos. A diferencia de un vínculo simbólico, que actúa como un puntero a otro archivo, un vínculo duro crea una referencia directa al mismo inode en el sistema de archivos. Esto significa que tanto el vínculo duro como el archivo original comparten el mismo contenido y, por lo tanto, cualquier cambio realizado en uno se reflejará en el otro. Los vínculos duros son útiles para la gestión de archivos, ya que permiten múltiples nombres para el mismo archivo sin duplicar el espacio en disco. Sin embargo, no se pueden crear vínculos duros para directorios (con algunas excepciones en sistemas de archivos específicos) ni para archivos en diferentes sistemas de archivos. En muchos sistemas operativos, los vínculos duros se crean utilizando un comando específico que permite a los usuarios establecer múltiples accesos a un mismo archivo de manera eficiente y organizada.
Historia: El concepto de vínculos duros se remonta a los primeros sistemas de archivos en Unix, que fueron desarrollados en la década de 1970. A medida que los sistemas operativos evolucionaron, la necesidad de gestionar archivos de manera más eficiente llevó a la implementación de esta característica. Los vínculos duros se convirtieron en una parte integral de la gestión de archivos en sistemas basados en Unix, permitiendo a los usuarios crear múltiples accesos a un mismo archivo sin ocupar espacio adicional en disco.
Usos: Los vínculos duros se utilizan principalmente en sistemas operativos basados en Unix para facilitar la gestión de archivos. Permiten a los usuarios crear múltiples nombres para un mismo archivo, lo que es útil en situaciones donde se necesita acceder al mismo contenido desde diferentes ubicaciones sin duplicar datos. También son utilizados en scripts y aplicaciones que requieren referencias a archivos sin preocuparse por la ubicación física del mismo en el sistema de archivos.
Ejemplos: Un ejemplo práctico de un vínculo duro sería crear un acceso adicional a un archivo de configuración en un sistema basado en Unix. Si un usuario tiene un archivo llamado ‘config.txt’, puede crear un vínculo duro en su directorio personal utilizando un comando específico. Ahora, tanto el camino original del archivo como el vínculo duro apuntan al mismo contenido, y cualquier cambio en uno se reflejará en el otro.