Descripción: El término ‘xerotérmico’ se refiere a entornos caracterizados por condiciones secas y cálidas, donde la disponibilidad de agua es limitada y las temperaturas suelen ser elevadas. Estos ecosistemas son típicos de regiones áridas y semiáridas, donde la vegetación y la fauna han desarrollado adaptaciones específicas para sobrevivir en condiciones de estrés hídrico. Las características principales de los ambientes xerotérmicos incluyen su baja humedad relativa, escasas precipitaciones y suelos que a menudo son pobres en nutrientes. La vegetación en estos entornos tiende a ser xerófila, es decir, plantas que han evolucionado para conservar agua, como los cactus y algunas especies de arbustos. La importancia de los ecosistemas xerotérmicos radica en su biodiversidad única y en su papel crucial en el equilibrio ecológico, ya que albergan especies que no se encuentran en otros hábitats. Además, estos entornos son sensibles a los cambios climáticos y a la actividad humana, lo que los convierte en un foco de estudio en el ámbito de la ciencia ambiental y la ecología, especialmente en el contexto de la sostenibilidad y la conservación de recursos naturales.